Un paraíso para los amantes del frío: conoce el pueblo más frío de España

Molina de Aragón, en Guadalajara, es considerado el pueblo más frío de España, con temperaturas extremadamente bajas durante el invierno. Ubicado en el «Triángulo del Frío» junto a Teruel y Calamocha, en enero suele registrar mínimas de -3,5ºC y nieva una media de cuatro días, con heladas presentes el 80% de los días del mes. La temperatura más baja registrada fue de -28,2ºC en enero de 1952, aunque en verano puede alcanzar máximas de hasta 38ºC.

A pesar de la fama de Molina de Aragón, otros pueblos también experimentan temperaturas extremadamente bajas durante los meses de invierno. Cantalojas, en Guadalajara, ha registrado temperaturas inferiores a -20ºC, incluso con heladas en verano. Zafrilla, en Cuenca, y localidades en Castilla y León como Santa Eulalia del Río Negro también destacan por sus bajas temperaturas. La mínima más baja registrada oficialmente en España fue de -32ºC en el Lago Estangento, en el Pirineo de Lérida.

Molina de Aragón, el pueblo más frío de España

Molina de Aragón alberga un gran patrimonio arquitectónico para. El castillo-alcázar, el más grande de la provincia Guadalajara, destaca como el símbolo medieval de la localidad. Éste imponente castillo románico, renovado tras la victoria de Alfonso I El Batallador, conserva seis de las ocho torres originales. El acceso a la fortaleza se realiza por la puerta del reloj, y la Torre de Aragón, una de sus principales atracciones, ofrece unas vistas impresionantes desde su terraza almenada.

Cerca del castillo, se encuentra la iglesia de Santa Clara, uno de los mejores ejemplos del románico tardío en la península. Su construcción presenta muros de sillería de piedra arenisca rojiza y un interior de una sola nave con presbiterio recto y ábside semicircular. También es de especial interés conocer el Monasterio de San Francisco, fundado en el siglo XIII y convertido en museo comarcal tras diversas transformaciones. Este museo ofrece una colección variada que incluye fósiles, restos arqueológicos y exposiciones sobre la evolución humana.

Entre otros lugares de interés, el puente viejo, construido en piedra arenisca rojiza, destaca por su estilo románico y su papel en conectar la ciudad con el monasterio de San Francisco. También es recomendable conocer la gran cantidad de palacios históricos, como el palacio del Virrey de Manila, que reflejan el pasado nobiliario de la localidad.

Además, pasear por las calles estrechas y antiguas de Molina de Aragón, como la judería y la morería, permite experimentar la atmósfera auténtica de la ciudad, con sus casas tradicionales y su encanto medieval.

Historia

Durante el periodo califal, la zona de Molina de Aragón estuvo escasamente habitada, principalmente por bereberes arabizados. Tras la desintegración del califato, se formó un pequeño reino de taifa mencionado en el «Cantar de Mio Cid». En 1128, Alfonso I de Aragón tomó la región, pero posteriormente pasó a manos de Castilla. En 1139, Manrique de Lara la conquistó nuevamente, formando el Señorío de Molina, un territorio independiente de Aragón y Castilla por más de siglo y medio.

En 1366, durante la guerra entre Castilla y Aragón, la población de Molina se rebeló contra Castilla y se puso bajo la soberanía aragonesa, regresando a Castilla en 1375 como parte de la dote de Leonor de Aragón. Durante la Guerra de la Independencia, la resistencia de los molineses provocó represalias de las tropas napoleónicas que incendiaron la villa. En reconocimiento, las Cortes le otorgaron el título de «Muy Noble y Muy Leal Ciudad».

Clima

Molina de Aragón tiene un clima continental. Los inviernos son muy fríos, con temperaturas medias mínimas de -5 °C durante 44 noches al año y un promedio de 122 noches con heladas. Las temperaturas invernales pueden descender hasta -28 °C, como se registró el 28 de enero de 1952. Los veranos en Molina de Aragón son agradables, con máximas diarias que superan los 30 °C en promedio, aunque sólo durante 40 días al año.

La estación meteorológica local muestra una precipitación anual promedio de 443,1 mm, concentrada en los meses de primavera y otoño. En invierno, nieva una media de 17 días, siendo diciembre y enero los meses con más nevadas. Entre los récords climáticos, destaca la temperatura máxima de 38 °C registrada el 14 de agosto de 1987, y la temperatura mínima de -28,2 °C del 28 de enero de 1952. La precipitación máxima diaria fue de 70 mm, que se dio el 30 de julio de 1970, y la racha de viento más fuerte alcanzó 104 km/h el 2 de diciembre de 1976.

Gastronomía

El cordero asado al estilo de Molina de Aragón es un plato emblemático del pueblo más frío de España, preparado con cordero tierno asado lentamente en horno de leña, lo que le otorga un sabor distintivo. Otro plato destacado es la trucha a la molinesa, que se pesca en los ríos locales y se cocina con un sofrito tradicional de ajos, pimientos y tomates. Finalmente, las migas de pastor reflejan las raíces rurales de Molina de Aragón, preparadas con pan duro desmigado, ajos, aceite de oliva y chorizo, resultando en un plato sencillo pero lleno de sabor.